Estrategia Financiera 4 min de lectura
Certeza financiera: cómo manejar la incertidumbre y el riesgo en el negocio
El objetivo de todo dueño de negocio es ganar dinero, pero a veces las piezas no encajan del todo. No se sabe de dónde viene el dinero o por dónde se va. Falta certeza financiera y no existen fundamentos que apoyen la estrategia.
Todo propietario de un negocio merece tener la confianza de saber lo que su negocio le pagará cada año. Y, si una empresa necesita una inyección de efectivo, el propietario merece saber exactamente cuánto efectivo y cuándo se necesitará. Es lo que se conoce como certeza financiera absoluta.
¿Qué es la certeza financiera?
La certeza financiera absoluta es un concepto simple y poderoso, pero requiere una gestión cuidadosa en 4 áreas clave de las finanzas:
- Estrategia financiera
- Control financiero
- Administración financiera
- Herramientas financieras
Se trata de áreas que permiten un sistema de gestión financiera integral y que evitan los problemas más comunes a los que se enfrentan los negocios que no cuidan este aspecto en su planificación. Porque, sin un sistema completo, no se sabe de dónde vendrá la próxima sorpresa y cuántas otras acechan al negocio.
Cuando se opera en la oscuridad, llegan pagos imprevistos, se acumulan las cuentas pendientes de cobro, hay que hacer frente a deudas y se constata, demasiado tarde, que hay un problema con el flujo de caja.
Es demasiado habitual encontrarse con empresas donde sus responsables no están seguros de cómo van a pagar una factura o incluso acerca de cuándo vence. Suelen ser gerentes frustrados porque no tiene una idea real de cuánto se llevarán a casa al final de la semana, del mes o del año. Y la situación empeora si recurren a sus tarjetas de crédito personales o al efectivo para tapar los agujeros causados por un sistema financiero defectuoso o inexistente.
Una gestión financiera correctamente implementada, dirigida por un CFO calificado, brinda la necesaria certeza financiera: esa capacidad de comprender cuándo, dónde y cómo el dinero del negocio irá y vendrá. Es esa certeza la única base sobre la que planificar el funcionamiento continuo y el crecimiento de la empresa es una inversión que genera múltiplos en valor para el negocio.
Cómo manejar la incertidumbre y los riesgos financieros dentro de una empresa
Procesos internos y datos
La certeza financiera comienza por contar con procesos internos que permitan asegurar que se cuenta con toda la información financiera en todo momento. Hace falta, primero, orden y, después, control.
La visibilidad sobre las cuentas, tener toda la información centralizada y los procesos automatizados ayuda a evitar el riesgo de errores que luego conducen a decisiones equivocadas.
Construir la historia del negocio en base a información
También es precisa la capacidad de construir, con esa información financiera diaria, la historia del negocio. De esta forma se avanza hacia la certeza financiera al entender que está pasando en la empresa.
Esta perspectiva hace posible aprender de los errores pasados para tomar mejores decisiones en el futuro. De la visibilidad, al aprendizaje y de ahí a la mejora continua, que es la clave del éxito.
Proyectar el futuro a partir del conocimiento generado
Por último, con dicha información hace falta proyectar el futuro, en particular los diferentes flujos de caja. Así es más sencillo anticiparse a los acontecimientos que están por venir, con el objetivo de tomar decisiones de financiamiento y de estructuración del negocio correctas.
Si bien en todas las empresas hay ciertos riesgos que no son controlables, cuando se tiene el control constante, aumentan las probabilidades de éxito.
¿Tienes las herramientas que te pueden ayudar a obtener la certeza financiera?