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Estrategia Financiera 8 min de lectura

El análisis financiero de una empresa más completo

Hacer el análisis financiero de una empresa completo es un ejercicio que requiere de cierta planificación y constancia. Las operaciones, el ciclo de conversión de caja o los estados financieros son algunos de los elementos clave a tener en cuenta al conducir una evaluación de este tipo.

Análisis financiero de una empresa para ganar visibilidad sobre sus operaciones

Un análisis operacional es clave para el negocio, ya que muestra la capacidad potencial que tiene de generar caja con su operación y tamaño. Una empresa puede estar acumulando pérdidas o bien ganancias, y es clave entender las razones para que ello suceda.

Si se desea alcanzar los objetivos de ventas mes tras mes, las conjeturas y la intuición no son fiables. Hacen falta datos objetivos. Esta información puede extraerse del CRM de ventas, donde deberían recogerse todos los datos sobre los acuerdos cerrados por los comerciales.

Para mejorar la eficacia de la función de ventas y tomar decisiones informadas basadas en datos, debe practicarse el análisis financiero de una empresa, enfocado en sus operaciones, con regularidad.

El análisis de datos de ventas proporciona inteligencia sobre la estrategia comercial o el desempeño del equipo, entre otros. Es una ventaja competitiva que no conviene perder.

La forma de conducir un proceso analítico de este tipo es siguiendo cuatro pasos:

  1. Analizar la data financiera que tiene que ver con la operación. Es decir, la capacidad que tiene el negocio de generar utilidades en base a la tracción de ventas.

  2. Descontar los costes directos, indirectos y los gastos necesarios para sostener dichas ventas y la estructura de la empresa.

  3. Evaluar el resultado y compararlo con los objetivos marcados para el negocio.

  4. Registrar esos datos para poder elaborar un archivo histórico que permita entender el rendimiento de cada mes.

Los KPI a monitorizar para llevar a cabo el análisis financiero de una empresa respecto de sus operaciones podrían ser valor del funnel de ventas (ingresos esperados de todas las oportunidades de ventas en un período de tiempo específico), valor de transacción promedio (dólar promedio que un cliente gasta en su producto/servicio en una transacción), las oportunidades de ventas (número total de oportunidades creadas por el equipo de ventas en un período específico) o el crecimiento de las ventas mensuales (nos dice cómo los ingresos por ventas crecieron/disminuyeron durante un mes).

Son métricas procesables que se pueden utilizar para optimizar el proceso y las estrategias de ventas.

Lo que puedes descubrir del ciclo de conversión de caja con el análisis financiero de una empresa

Por otro lado, es muy relevante entender cómo estas ventas y estos costos afectan la caja, es decir, cómo de rápido cobramos a nuestros clientes y pagamos a nuestros proveedores. Esto se llama ciclo de conversión de caja, es decir, cuánto se tarda en ver el dinero de las utilidades en caja.

El ciclo de conversión de efectivo es, en realidad, un cálculo de flujo que intenta medir el tiempo que le toma a una empresa convertir su inversión en inventario y otros insumos de recursos en efectivo. En otras palabras, mide cuánto tiempo está inmovilizado el efectivo en el inventario antes de que se venda y se cobre a los clientes.

El ciclo del efectivo tiene tres partes distintas:

  1. La primera parte del ciclo representa el nivel de inventario actual y cuánto tiempo le tomará a la empresa vender este inventario. Esta etapa se dimensiona utilizando el cálculo de días de inventario pendiente.
  2. La segunda etapa del ciclo de efectivo representa las ventas actuales y la cantidad de tiempo que se necesita para recolectar el efectivo de estas ventas. Esto se dimensiona utilizando el cálculo de días de ventas pendientes.
  3. La tercera etapa representa las cuentas por pagar pendientes actuales. En otras palabras, esto representa cuánto debe una empresa a sus proveedores actuales por compras de inventario y bienes y cuándo la empresa tendrá que pagar a sus proveedores. Esto se dimensiona utilizando el cálculo de los días pendientes de pago.

Fórmula del ciclo de conversión de efectivo

El ciclo de conversión de efectivo se calcula de la siguiente manera:

Ciclo de conversión de efectivo = días de inventario pendiente ((inventario/costo de ventas) x días*) + días de ventas pendientes ((cuentas recibidas/ventas netas a crédito) x días*) – días por pagar pendientes ((cuentas por pagar/coste de ventas) x días*)

*Se hace referencia a los días correspondientes al periodo de tiempo que se quiere analizar.

Como ocurre con la mayoría de los cálculos de flujo de efectivo, los cálculos más pequeños o más cortos casi siempre son buenos. Un ciclo de conversión pequeño significa que el dinero de una empresa se inmoviliza en el inventario durante menos tiempo. En otras palabras, una empresa con un ciclo de conversión pequeño es más eficiente puesto que puede comprar inventario, venderlo y recibir efectivo de los clientes en menos tiempo.

Cómo el análisis financiero de una empresa ayuda a conocer su salud

Por último, se debe** analizar la salud financiera actual de la empresa en cuanto a su capacidad de cubrir sus obligaciones (pasivos) de corto y largo plazo**. Es decir, es necesario entender cómo de endeudada está la empresa, cuánta caja tiene, cuánta deuda tiene con sus proveedores o cuánto dinero le deben sus clientes, entre otros.

Esto, nos permite entender, más allá de la operación, si la empresa está bien o mal parada financieramente y cuál es su capacidad para enfrentarse al futuro. Entre las acciones que pueden llevarse a cabo con este fin se encuentran:

1- Analizar el balance general permite conocer la situación financiera de una empresa en un momento específico. Proporciona una instantánea de sus activos, pasivos y capital social. El balance proporciona datos que ayudan a analizar lo siguiente:

  • Cuánta deuda tiene la empresa en relación con el capital social.
  • Cuál es la liquidez de la empresa a corto plazo (menos de un año).
  • Qué porcentaje de activos son tangibles y qué porcentaje proviene de transacciones financieras.
  • Cuánto tiempo se tarda en recibir los pagos pendientes de los clientes y reembolsar a los proveedores.
  • Cuánto tiempo lleva vender el inventario que la empresa tiene disponible.

2- Analizar el estado de resultados para comprender la posición financiera y el desempeño de una empresa durante un período. Al observar los ingresos, los gastos y las ganancias obtenidas se obtiene información sobre la salud financiera de una empresa que facilita analizar lo siguiente:

  • Cuánto están creciendo los ingresos durante ciertos períodos contables.
  • Cuál es el margen de beneficio bruto de los bienes vendidos.
  • Qué porcentaje de los ingresos genera una ganancia neta después de todos los gastos.
  • Si la empresa puede cubrir los pagos de intereses de la deuda.

3- Analizar el estado de flujo de efectivo para ver cómo una empresa utilizó su efectivo durante un período contable y poder evaluar:

  • La situación de liquidez de la empresa.
  • Las fuentes de efectivo de la empresa.
  • El flujo de caja libre que genera la empresa para invertir más en activos u operaciones.
  • Si el efectivo total ha aumentado o disminuido en ese periodo.

Analizar las razones financieras sirve para determinar la salud financiera general de la empresa al conocer su rentabilidad, liquidez, solvencia y eficiencia. Se trata de un esfuerzo fundamental para convertir la información obtenida a partir de los datos en acciones que beneficien al negocio.

Si juntamos estos análisis que hemos hecho por separado, podemos tener una idea mucho más clara de lo que funciona o no financieramente en el negocio, ya que sabremos cuál es su situación actual, cómo genera caja la compañía y, por tanto, cómo se prepara para el futuro.

Además de realizar cada mes el análisis financiero de una empresa, conviene repetir la evaluación de forma periódica para entender su evolución y advertir tempranamente cualquier cambio de tendencia.